domingo, 26 de mayo de 2013

Rebuscando.

Me he quedado pensado en qué sería de mí si hubiese sido valiente
a la hora de olvidarte.
Ha sido una pérdida de tiempo, la verdad
pero creo que ya es costumbre que lo haga recordando tu nombre.

Recorriéndome las piernas 
como si tus manos fueran las mias
engañándome, ya sabes.

Ni sé ser contigo, ni sin ti. 
No conmigo, no sin oirte reír.

El hecho de rendirme ante la adversidad que tanto te describe
me hace sentir pequeña
y no de las dudas infinitas, precisamente.

Pero tal y como subes, bajas.
Aún creyendo que jamás lo harías, cediste.
Sin sentido, joder.
Y ahora nada lo tiene.


Seguir vomitándote las ruinas 
que ya no tienen por qué salpicarte,
dándote privilegios que no debería ni nombrarte.
Eso, es lo que me hace odiarme
U odiarte.
No hay diferencia entre a ti o a mí,
lo que sí que hay
es distancia
y esta vez
la pienso mantener.


Volveré a mentirnos, tranquila.

No hay comentarios:

Publicar un comentario