jueves, 2 de diciembre de 2010

Eros.

Te amaba.
Como jamás habia amado a nadie.
Sabia que ibas a ser especial, increiblemente especial.
¿Por qué te has ido?

Todavia no te habia conocido suficiente.
No habia visto tus ojos reflejados en el espejo de mi habitación.
No tenia tu foto de fondo de pantalla del móvil.
No te habia vestido a mi antojo.

Creí que me esperaba toda una vida a tu lado.
En cambio, ya no estas.

Y nunca estarás.

Nunca.

Nunca cumplirás un año, ni dos, ni tres.

¿Cómo pudistes morir sin ni siquiera haber nacido?

Un ventitrés de Octubre, mi alma se partió en dos.

¿Dónde has dejado esa parte que te habia dado a ciegas?
¿Dónde la puedo encontrar?
¿Dónde puedo volver a sonreir sin tu sonrisa?

No puedo.

Me has echo daño sin ni siquiera haber nacido.
Pero te perdono.
¿Sabes por qué?

Porque te quiero Eros,
Porque aunque te hallas ido,
Yo seguiré aquí por tí,
Viviendo lo que no has podido vivir,
Viendo lo que no has podido ver,
Y, sobre todo,
Amando lo que no has podido amar.

EROS, TE QUIERO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario